Unos de los cambios màs profundos de la actualidad es el que ha afectado a la familia,
Cada vez màs la mujer tiende a compartir con el hombre trabajo, ganancias y responsabilidades,
el patrimonio ha perdido su valor hegemònico para dejar sitio al salario. No es de extrañar,pues
que en este mundo ser simplemente ama de casa no ocupe el rango de Profesiòn.
Lo que sì parece incuestionable es que el ser humano tiene necesidad innata de desarrollarse,de llegar a ser todo aquello que puede ser. Si esto no ocurre, no es de extrañar que se sienta inquieto y se rebele cuando ha de adaptarse a un papel que no le permite su desarrollo personal.
Si ademàs tenemos en cuenta que las tareas del hogar sòlo requiere una capacidad mental de ocho años, no es extraño que muchas mujeres se sientan incòmodas realizando un trabajo muy por debajo de sus posibilidades.
En cuanto al problema de què profesiones son màs adecuadas para la mujer, Fingermann, por ejemplo, responde que todas, siempre que posea vocaciòn, aptitudes y nivel de inteligencia adecuado.
Dado que no puede hablarse estrìctamente de vocaciòn en un mundo en el que el panorama profesional es tan amplio y variado.
En este sentido serà conveniente tener presente los intereses y actitudes de la persona, la inteligencia, las aptitudes, asì como la personalidad.
Intervienen, ademàs, otros factores, tales como la familia y condicionamientos sociales, los medios econòmicos y la preparaciòn adecuada, no olvidando, tampoco, las necesidades del mercado de trabajo.
Una vez establecidas las aptitudes, hay que tener en cuenta la personalidad. Es evidente que, ante una situaciòn dada, no todos respondemos del mismo modo, y en gran parte el èxito en una profesiòn està determinado por la personalidad de quien la ejerce.
Por otra parte, una persona muy introvertida, por ejemplo, no podrà orientarse hacia tareas que impliquen facilidad de contacto o gran movilidad, como es el caso de las ventas.
Para dilucidar los intereses preponderantes en uno mismo, existen cuestionarios eficaces. Podemos tener una idea aproximada pensando què tipo de actividades nos gusta realizar en nuestro tiempo libre.
Cuando se posee ya un conocimiento preciso de las aptitudes, intereses y personalidad, de forma que se ha encontrado el àrea profesional mas adecuada, se requiere una gran dosis de
motivaciòn y esfuerzo para entrar en acciòn y seguir tu objetivo.
